Respira, fluye y bebe: guía esencial para yoguis hidratados

Tema elegido: Consejos de hidratación para yoguis. Bienvenido a un espacio donde la práctica consciente se encuentra con hábitos sencillos y efectivos para mantener tu cuerpo, tu mente y tu energía en equilibrio. Suscríbete y comparte tus dudas para que crezcamos juntos, sorbo a sorbo.

Antes de la esterilla: prepara tu hidratación

Antes de desplegar la esterilla, revisa el color de tu orina: un tono pajizo claro suele indicar una hidratación adecuada. Si es muy oscura, añade agua poco a poco. No busques la perfección, busca constancia. Cuéntanos si esta regla te resulta útil.

Antes de la esterilla: prepara tu hidratación

Como orientación, bebe entre 5 y 7 ml de agua por kilo de peso unas 3–4 horas antes. Si pesas 60 kg, eso serían 300–420 ml. Ajusta según clima y sensación personal, sin forzarte. ¿Te funciona esta referencia? Comparte tus ajustes en comentarios.

Durante la práctica: sorbos inteligentes sin romper el flujo

Escucha las señales que de verdad importan

Mantén cerca tu botella y bebe cuando notes boca seca, dificultad para concentrarte o un leve mareo. Si aparecen calambres o náuseas, pausa en Balasana y toma algunos sorbos. Recuerda: entre 0,4 y 0,8 litros por hora puede ser razonable según sudoración.

Yoga caliente y electrólitos: una dupla necesaria

En clases de hot yoga o días de calor, incorpora electrólitos. Para sesiones largas, prioriza bebidas con sodio moderado y sin exceso de azúcar. Revisa etiquetas y encuentra tu equilibrio. ¿Cuál te funciona mejor? Recomiéndanos tu opción en los comentarios.

Evita la hiponatremia: equilibrio ante todo

Beber demasiada agua de golpe puede diluir el sodio en sangre y causar fatiga o dolor de cabeza. Prefiere sorbos espaciados, escucha tu sed y, si sudas mucho, añade una pizca de sodio con criterio. Tu seguridad está primero; practica con consciencia.
Si perdiste mucho sudor, intenta reponer aproximadamente 1,5 litros por cada kilo de peso perdido. Si no te pesas, busca orina clara y sensación de ligereza en las próximas dos horas. Evita atracones de líquido; el cuerpo agradece la constancia.

Después del savasana: rehidrata con intención

Combina agua con alimentos como plátano, yogur con una pizca de sal, sopa ligera o agua de coco sin excesos. Así ayudas a reponer minerales sin sobrecargar el estómago. Adapta a tus necesidades y alergias. ¿Cuál es tu snack favorito de recuperación?

Después del savasana: rehidrata con intención

Estaciones, clima y horarios: adapta tu hidratación

En meses cálidos, elige bebidas frescas pero evita el hielo excesivo que puede incomodar el estómago. Lleva toalla, viste telas transpirables y añade pausas para sorbos breves. ¿Cómo ajustas tu hidratación en olas de calor? Cuéntanos tus estrategias.

Estaciones, clima y horarios: adapta tu hidratación

El agua tibia con un toque suave de jengibre puede sentirse amable antes y después de la práctica. Evita bebidas muy azucaradas; buscan aliviar, no pesarte. Reconoce si el aire seco te deshidrata sin notarlo e incrementa sorbos conscientes entre sesiones.

Historias reales desde la esterilla

Carla contaba que en una clase intensa comenzó con calambres en los pies. Añadió electrólitos moderados en sesiones largas y los calambres desaparecieron. No fue magia: fue atención, registro y paciencia. ¿Has vivido algo parecido? Te leemos con interés.
Seaforth-tz
Privacy Overview

This website uses cookies so that we can provide you with the best user experience possible. Cookie information is stored in your browser and performs functions such as recognising you when you return to our website and helping our team to understand which sections of the website you find most interesting and useful.